Malas noticias nos llegan desde las 2 compañías aéreas low cost más famosas en España, Ryanair y Vueling: cobrarán un recargo a aquellos clientes que hayan comprado sus billetes antes del 1º de julio, fecha en la que entró en vigor la subida de las tasas aeroportuarias. Y además lo harán ya, sin esperar a una decisión conjunta de las otras compañías aéreas.
Eso sí, las dos compañías recaudarán el dinero en formas distintas.
Vueling ha creado en su web una nueva ventana con título «Incremento tasas aeroportuarias» donde explica el por qué del recargo y las 4 modalidades con que el cliente podrá abonarlo. La primera forma de pago es a través de la propia página web; la segunda es llamando a un número de teléfono habilitado al efecto; la tercera, a través de un formulario para los supuestos en los que se ha comprado el billete a través de una agencia de viajes y, por último, aceptando un cargo en la misma tarjeta de crédito con la que se realizó el pago.
Ryanair contempla prioritariamente esta última opción. Procederá al pago del recargo directamente en la tarjeta de crédito con la que se hizo la compra del billete. El aviso se envió a los usuarios a través de un correo electrónico informativo.
¿De qué cifras estamos hablando? La subida del 10,2% de las tasas aeroportuarias aprobada en los Presupuestos Generales del Estado, supone incrementos del 50% en Barajas y El Prat. En el caso de Barajas, Ryanair cobrará 9,12 euros y 8,95 euros en El Prat.
Los viajeros que no acepten este cargo adicional podrán cancelar sus vuelos y solicitar a la compañía el reembolso del billete antes del próximo viernes 13 de julio, de lo contrario se les cargará el sobrecoste a su tarjeta de pago.
La práctica de las compañías aereas low cost ha creado ya polémicas tanto entre los clientes como en la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU).
La OCU pide revisar con atención las condiciones del contrato. Al ser un billete de bajo coste y ante la posibilidad de que el incremento de la tasa pueda ser desproporcionado, se puede «solicitar la anulación del contrato con derecho a reembolso del precio pagado».
Si el usuario decide realizar el vuelo porque el no hacerlo le ocasionaría perjuicios mayores, cabe la posibilidad de aceptar el pago del recargo y solicitar su devolución después «demostrando los perjuicios que te habrían ocasionado las penalizaciones por cancelación de otros servicios», informa la OCU. Otra posibilidad sería la de la revisión de precios, siempre no se aplique en los 20 días anteriores a la fecha de salida del viaje, y en el caso exclusivo de los viajes combinados.
