La grave crisis que atraviesa el sector aéreo, tanto en España como en el mercado internacional, por la caída en el número de pasajeros está obligando a las aerolíneas a replantear su modelo de negocio, reducir costes y ajustar plantilla. Dentro de este proceso de reestructuración, Iberia tiene «en estudio» cobrar a los pasajeros por facturar sus maletas, algo que ya hacen las líneas de bajo coste, en la mayoría de empresas en Estados Unidos y también se está planteando en otras europeas por cada segundo bulto en bodega como British Airways, que precisamente desde hoy cobra por reservar asientos. No obstante, según fuentes de la compañía consultadas, de momento no se fijado una fecha para su puesta en marcha ni las tarifas que costaría este servicio.

Tal y como explican desde Iberia, la «tendencia del mercado» a favor de este política de cobro por maleta ha llevado a la empresa española a plantear una medida que, en cualquier caso, «no se aplicaría a todas las tarifas, si no a las más bajas». El objetivo, añaden, es dar respuesta a la creciente demanda de pasajeros que buscan pagar lo mínimo posible para volar, aún a costa de ver reducidos sus servicios y que, en este caso, optan por viajar sin maleta. No obstante, de momento declaran que no han pensado en cobrar por reservar asiento.

Sin embargo, desde las asociaciones de consumidores advierten que cobrar cobrar por llevar el equipaje en la bodega podría ir contra la ley. Según ha recordado hoy Facua-Consumidores en Acción, que ha llevado a los tribunales a un total de 16 compañías por este mismo motivo, la Ley 48/1960, de 21 de julio, sobre Navegación Aérea establece que «el transportista estará obligado a transportar juntamente con los viajeros, y dentro del precio del billete, el equipaje» y, según añaden, solo «el exceso será objeto de estipulación especial».

En la misma línea, la portavoz de la Organización de consumidores y Usuarios (OCU), Ileana Izverniceanu, ha criticado que la intención de Iberia «es una subida de precios con subterfugios» y ha recordado que también fue la primera en quitar el catering a los pasajeros. «Iberia, en la práctica, se diferencia muy poco de las low cost», ha denunciado antes de advertir de que «los pasajeros dejarán de volar con las compañías tradicionales si dejan de ofrecer servicios adicionales ya que para tener lo mismo viajarán con compañías más económicas».

Además, ha alertado que «dicha medida creará aún más caos en los aeropuertos ya que habrá más colas y puñetazos para embarcar cuanto antes y llevar equipaje de mano y eso se suma al caos de las medidas de seguridad».