En cuanto Teri weissinger se presentó al Aeropuerto Internacional de San Francisco con m¡nada más que su equipaje, 30 dólares y un billete de avión con destino Idaho, no tenía ni la más menor idea que esa sería su alojamiento durante los próximos ocho días.

El caso es que al facturar una maleta más de lo que su billete le permitía se generó un recargo de 60$ que no podía pagar al momento. Entonces, Teri consideró dejar el equipaje al aeropuerto pero por razones de seguridad referente al terrorismo tampoco podía dejar su maleta en el aeropuerto e irse. Entonces ella consideró la posibilidad de comprar otro billete que le permitiese facturar un bulto adicional y podía hacerlo, por el módico precio de 1.000$. Fue entonces cuando quedó atrapada en el aeropuerto.

Durante ocho días vagó por el aeropuerto, durmió en la moqueta y comió de lo que la gente y los restaurantes tiraban. Por si fuera poco sufrió ataques de ansiedad e incluso estuvo a punto de ser arrestada, pues la acusaron de ser una vagabunda. Y todo esto por llevar una maleta de más! Finalmente pudo volar a Idaho, gracias a la ayuda que la asociación religiosa del aeropuerto le ofreció. Le pagaron 210$ con lo que pudo cubrir el vuelo y el equipaje adicional que U.S. airways le pedía.